Para fortalecer a la recién creada Fiscalía Ambiental de Cuernavaca, el Gobierno Municipal encabezado por José Luis Urióstegui Salgado, hizo entrega de una patrulla ambiental y un sonómetro que redoblarán la vigilancia y continuarán con las tareas de preservación y restauración del equilibrio ecológico y la protección al medio ambiente.
En el marco de arranque del programa de Adopción de Espacios Públicos que busca recuperar la imagen urbana de la ciudad en corresponsabilidad con sus habitantes, la fiscal ambiental, Laura Elizabeth García Méndez recibió de manos del alcalde de Cuernavaca y el secretario de Desarrollo Sustentable y Servicios Públicos, Pablo Aguilar, el equipo para hacer frente al maltrato a los ecosistemas de la ciudad y a todo tipo de contaminación.
En este tenor, recordó que la Fiscalía Ambiental de Cuernavaca es la encargada de vigilar el cumplimiento de la legislación ambiental, fomentando en la ciudadanía la consciencia en el cuidado del ambiente en base al principio de prevención, incluyendo entre sus facultades prevenir y sancionar el ruido, el maltrato animal, la tala y poda árboles, el desperdicio de agua, el manejo de residuos sólidos, entre otros rubros.
Ante medios de comunicación, precisó que dentro del reglamento se cuenta con la figura de la denuncia popular mediante la cual la ciudadanía puede llevar a cabo diversas participaciones con la autoridad, denunciando infracciones que consideran sean susceptibles de ser sancionadas, registrando hasta momento 120 por diversas infracciones, que van desde ruido, poda y tala de árboles, maltrato animal hasta basura en la vía pública, que son los principales problemas que han ubicado de manera reiterada.
Otro de los grandes problemas en la capital del estado, afirmó, es la contaminación acústica, principalmente en el Centro Histórico, por lo cual con el sonómetro que les fue entregado podrán verificar el nivel de ruido para saber si pasa el nivel permitido, siendo sancionado hasta con el cierre del lugar donde se registra.
A pesar de ser relativamente nueva la Fiscalía Ambiental ha logrado posicionarse como una autoridad confiable entre la población cuernavacense, recibiendo diariamente entre cinco a seis denuncias, las cuales se están desahogando conforme a derecho y respetando los tiempos establecidos en la ley para, si fuera el caso, aplicar las sanciones administrativas correspondientes que pueden ser multas de hasta 200 a 300 UMAS.
La fiscal ambiental, Laura García, indicó que un 40 por ciento de las denuncias recibidas son por maltrato animal hacia perros, particularmente porque están amarrados, abandonados, o muerden a terceros por descuidos; le sigue la poda de árboles con tres denuncias diarias que, si bien no está prohibido, si requiere contar con el aval de la autoridad; además de la quema de basura y tirar los desechos sólidos en barrancas.
Cabe destacar que la figura de Fiscalía Ambiental solo existe en 5 municipios de más de 3 mil con los que cuenta el territorio nacional, sumándose a ellos Cuernavaca.