Uso nocturno de pantallas electrónicas aumenta riesgo de trastornos del sueño: Issste


 

Los trastornos del sueño son de causa multifactorial y afectan aproximadamente a 15 millones de personas en nuestro país; sobre todo, por el uso nocturno de aparatos electrónicos como televisión, celulares o computadoras. Por ello, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) recomienda a la población evitar esta práctica y favorecer el descanso adecuado.


Con motivo del Día Mundial del Sueño, el subdirector médico de la Clínica de Especialidades de Neuropsiquiatría, Fernando Pineda Marín, señaló que se estima que 45 por ciento de la población mexicana tiene mala calidad del sueño. De ahí la relevancia de sensibilizar a la población sobre la importancia de este factor de riesgo.


Dormir bien es tan importante para la salud integral como mantener una alimentación saludable y hacer ejercicio regularmente. 


Destacó que entre las consecuencias de sufrir privación del sueño están: presentar enlentecimiento funcional, daños cognitivos como la consolidación de la memoria, dificultad para concentrase y poner atención, alteración del equilibrio e irritabilidad.


“Se calcula que más de 30 por ciento de accidentes a nivel general, automovilísticos y aéreos, están relacionados en tener mala calidad de sueño”, afirmó el psiquiatra.


A manera de prevención, Pineda Marín recomendó mantener hábitos de higiene del sueño, como establecer horarios para dormir y levantarse; apagar aparatos electrónicos una hora antes de acostarse, y no ingerir café o bebidas azucaradas; evitar realizar ejercicio de alto impacto por la noche y no realizar actividades estresantes en estos horarios.


Destacó que el insomnio (dificultad para dormir, conciliar y mantener el sueño) es el trastorno más frecuente de este tipo, seguido por el síndrome de apnea obstructiva del sueño, hipersomnia, narcolepsia y las parasomnias.


Por sus características hormonales, agregó, las mujeres son más propensas que los hombres a presentar estas patologías, y el riesgo suele aumentar en toda la población en edades avanzadas, además de las personas que laboran de noche, rolan o doblan turnos. 


La obesidad, enfermedades cardiacas, metabólicas, neurológicas y mentales como depresión, ansiedad, esquizofrenia y trastorno bipolar, también pueden originar un diagnóstico de trastorno del sueño, puntualizó.


Problemas para dormir, despertar constantemente, sentir sueño durante el día, dificultades para concentrarse, irritabilidad, cansancio crónico, tensiones musculares, dolor de cabeza frecuente, son síntomas sugerentes de algún trastorno de este tipo, por lo que es importante acudir a su médico o médica de primer contacto para una evaluación, identificar la causa y tratarla. 


“Pasamos casi la mitad de nuestra vida durmiendo. El sueño tiene un propósito: que todos los sistemas de nuestro organismo entren en un proceso de reparación y reestructuración, incluyendo las células neuronales y el proceso de consolidación de la memoria. Por lo tanto, es importante cuidar y mantener su calidad, para que nuestro organismo continúe su funcionamiento en equilibrio y sin alteraciones”, concluyó el especialista.