En el marco de las elecciones para la rectoría de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), se han suscitado acusaciones sobre la presunta injerencia de intereses externos en el proceso.
A pesar del compromiso por parte de Fabiola Álvarez y el Consejo Universitario para garantizar transparencia y legalidad, voces críticas han levantado señalamientos sobre posibles influencias externas que podrían incidir en el resultado de la elección. Estas denuncias plantean un desafío adicional para el fortalecimiento democrático al interior de la institución.
El debate sobre la posible intervención de factores externos agrega una capa de complejidad a un evento que ya se vislumbra como trascendental en la historia de la UAEM.